LO LLENO Y LO VACÍO

“Lo lleno y lo vacío”

El próximo sábado 15 de junio a las 13 horas se inaugura en The 451 Shop “Lo lleno y lo vacío”, exposición colectiva comisariada por Natalia Alonso Arduengo y con obras de los artistas Rodrigo de Miguel, Isabel Gil, José Quintanilla y Diana Velásquez.

Paisajes urbanos y paisajes rurales, ciudades sobrepobladas y campos en abandono, megalópolis y Laponias, multitudes y soledades. En definitiva, un análisis sobre lo lleno y lo vacío y una desdicha común: la pérdida de sentido, de identidad, de memoria, de historia. ¿Cómo mantener una continuidad entre ambos, entre la nada y el todo? Las ruinas no sólo remiten al pasado sino al futuro. ¿Ha desaparecido la ruina convencional para dejar paso a la obra en construcción? ¿Cuáles son las topografías que nos esperan?

Natalia Alonso Arduengo
, comisaria de la exposición

“Lo lleno y lo vacío” es la quinta propuesta expositiva de 451. Se trata de una colectiva en la que participan cuatro artistas bajo el comisariado de la historiadora del arte Natalia Alonso Arduengo. La muestra reunirá dibujo, obra gráfica y fotografía entorno a la dicotomía entre paisajes urbanos y paisajes rurales, ciudades sobrepobladas y campos en abandono, megalópolis y Laponias, multitudes y soledades.

El título de la muestra toma como fuente de inspiración el ensayo “El tiempo en ruinas” del antropólogo francés Marc Augé, en el que reflexiona sobre los paisajes contemporáneos, las ruinas pasadas y futuras, la urbanización del mundo y sobre cómo todo producto de la sobremodernidad afecta a nuestra conciencia histórica y nuestra experiencia del tiempo.

Los terrenos despoblados de las fotografías de José Quintanilla corresponderían al concepto de lo vacío. Ya no queda en ellos nadie que los habite. Lo lleno estaría ubicado, por el contrario, en la ciudad. Sin embargo, se da la paradoja de que los ambientes urbanos demasiado llenos se encuentran, en otro sentido, vacíos. Ocurre en los dibujos de Diana Velásquez, que recogen obras en construcción que pueden no llegar nunca a tener moradores. Este vacío se traduce también a nivel emocional en la psique de los habitantes. El vacío como soledad e incomunicación se percibe en algunos de los dibujos de Rodrigo de Miguel y el vacío como pérdida de identidad y caos mental está presente en las figuras femeninas de Isabel Gil, atrapadas en la multiplicación de sus propias extremidades.

“Lo lleno y lo vacío”
Exposición colectiva
Del 15 de junio al 30 de julio de 2019

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